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- SAL Y AZÚCAR -

DE MORMERAS, OVEJAS NEGRAS, ENVEJECIMIENTOS Y ARDUAS ESPERAS

DE MORMERAS, OVEJAS NEGRAS, ENVEJECIMIENTOS Y ARDUAS ESPERAS

Con este título tan largo quiero reflejar lo que me ha pasado, o que me pasará próximamente. Sé de sobras que he pasado de tener un blog-diario (en el que hablaba de mi vida en plan libro abierto, contaba mi vida y ya está, con su respectiva gente y sus respectivos lugares y/o situaciones) a tener un blog-que-parece-que-no-se-entiende-nada-de-lo-que-digo, muchos lectores me acusan de ello, ya que en este estilo (que prefiero, digámoslo desde el princpio) hablo en un estilo que varía de la primera, a la segunda, tercera persona; y a veces ni siquiera éso. Pongo claves que poca gente capta, o pilla, pero en el fondo gusta porque está bien redactado y ya.

Lo dicho, que en esta temporada estoy prácticamente en un sinvivir por todos estos aspectos que trato en el artículo, que son como reza, y que procuraré hacer comprensibles para mis lectores, jejeje.

- De la mormera qué decir. Yo normalmente me suelo poner pachucha una o dos veces al año. Y es algo que me da mucha rabia, principalmente porque me coge de lleno, sin avisar. Y aparte que me quita de golpe y porrazo el sentido del olfato y del gusto. Cosa que evidentemente me hace poca gracia porque yo me rijo mucho por estos dos sentidos. Podría estar sin degustar algo, pero no sin olerlo... ¡es imposible! Lo dicho, que ando Frenadol pa’ arriba, Frenadol pa’ abajo, junto con Termalgin y Flutox que parezco una farmacia ambulante. Por no hablar de la ronquera y los mocos, soy casi casi como un grifo. Espero que se pase pronto, lo del mal tiempo me da igual (relativamente) pero estar con esta mormera... no, señores, no.

- De ovejas negras no quiero ser muy directa. Y no es por miedo, vaya. Todo el mundo sabe que una manzana podrida pudre a las demás que están en el cesto, y que muerto el perro, se acabó la rabia. Y así ha sido en mi familia. Una oveja negra, o favorita para otros, ha dejado de vivir y por ende, de hacer daño. Siento pena, claro, pero ha hecho daño y ha hecho que mucha gente se haya peleado o haya ido al otro barrio por su culpa. Oveja negra, lo siento, pero el recuerdo tuyo que tengo es de verte en la casa del pueblo con una trompa de aquí a Pekín. Y aunque en mi casa tuviste tanto detractores como aplaudidores, yo te digo que no harás ya más daño, pero que descanses. Para siempre.

- De envejecimientos. pues que este fin de semana ha sido mi cumpleaños, y que lo he celebrado con mormera, como no podía ser de otra forma. Fui con Duby a una pizzería conocida y me pasé toda la noche con "cara besugo", en las fotos salgo con sueñín, cansancio... ¡tenía 38 de fiebre! Y no quise hacer el feo. Pero de todos modos estrenaba modelitos de lo más mono, algunos regalados por él o por otras personas especiales y le hice degustar cosas nuevas. Y brindamos muchas veces. Y con los hefes fuimos a mi restaurante favorito (uno de tantos... pero éste sobre todo) y terminamos muy a gusto. Pero sobre todo yo, con llamadas, mensajes, e-mails y demás que me demostraron que la gente se acuerda de mí.

- Y finalmente, la ardua espera. Esta semana terminará el suplicio y entraremos en el Juicio Final, donde nos condenaremos o nos salvaremos. Valorarán nuestros actos y pesarán nuestras almas. Pero los demás también cuentan, tanto o más que tú. No hay que ser bueno, hay que ser el mejor. Es una amarga espera y una dulce agonía que te encadena y te nutre a la vez. Confías en algo y en alguien, en que vuelva y regrese...

Lo dicho, que este mes de Octubre se resume en mormeras, ovejas negras, envejecimientos y esperas...

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