Y LA TARTA LLEGÓ

La tarta que veis en esta foto es la que nos hemos zampado a la hora de la comida los que anunciaba ayer, salvo mi padre. Es de Mercadona, pero estaba buenísima. La capita de arándanos (auténticos, ya que me acuerdo del sabor que tenían cuando los comí en otra tarta similar en el cumpleaños de Annalisa en Florencia) junto con la nata y la galleta de debajo... uhmmm, estaba de muerte. Blandita y crujiente. Y luego ver a la abuela soplar las velas -que posteriormente se llevó a casa- con una emoción inusitada, junto con la comidita rica que preparamos sólo para ella... pulpo... croquetas... morcilla...

Decía que no se lo merecía, que era demasiado... pero se lo comió todo como una campeona... le hice varias fotos y ésta de aquí es la de antes de todo el tinglado... ella, que nunca había soplado velas de una tarta, se emocionaba y todo... pero bien... a todos nos gusta que nos hagan estas sorpresas de vez en cuando... ¿no? A pesar de que el pobre abuelo no se enteraba de nada.

De todos modos... ¡Que cumplas muchos más, Yaya!