Blogia
- SAL Y AZÚCAR -

PÉRDIDAS

PÉRDIDAS

Pérdidas. Bastantes, sin saber de qué. Junto con estadísiticas que manan y fluyen, que desconoces qué quieren, qué buscan y qué hacen.

Pérdidas de tiempo, que te quitan de hacer lo que quieres de ellas pero en el fondo crees que no ha venido tan mal como tú creías, porque la gente cuenta contigo sin ni siquiera habértelo planteado; y ello es una gratificante sorpresa. Gente nueva que conoces, que tratas con confianza y placer y que, día tras día, te ahúman y te cuentan su vida como si siempre te hubiesen visto en ella.

Pérdidas de dinero, pero no te pesa porque crees que va a ser para algo bueno, útil y hasta maravilloso. Olor a flores que quieres que permanezca siempre dentro de ti, mientras te frotas con una esponja-nenúfar nueva que al principio rasca de dolor, que te hace cambiar de mano... pero que te gusta porque te hace sumergirte en un baño de burbujas inaudito. Y mañana piensas repetir la operación, como un mantra que te empuja y te abduce.

Pérdidas de gasolina, pero es por tu bien. Los tornillos no se mueven, pero los de tu cabeza rigen de una manera maravillosa. Tienes reflejos y puede que no se te haya olvidado ni conducir. Miras, te reflejas, sigues y avanzas, mientras la música del Gran Hombre te hace balancear, siempre que tú lo desseas y no porque otros no te coaccionen a hacerlo.

Concluye mañana un mes de Julio extraño y apetitoso a partes iguales, en el que colores, olores, formas y sabores han dado una conjunción magnífica que muy raramente voy a poder olvidar...

Como tantas pérdidas que no merece la pena poner aquí...

0 comentarios