MOMENTO DUCHA

Esta mañana, aprovechando que ayer no salí por ahí de farra ni tuve clase con el Marqués, me di una ducha larga, larga... de las que hacen historia... en mi mamparita con efecto de lluvia y acompañado de la ecuación gel de ducha-crema corporal-desodorante-perfume... todo rico, rico, rico... desde que en Yves Rocher reformularon hace poquito una de mis líneas de baño favoritas (Hamamélis) me presta más el baño, o mejor, la ducha. Yo bañarme -entiendo, en bañera y tirarme mil años, ducharme lo hago todos los días- lo suelo una vez cada cierto tiempo, y no es por gastar más agua de la necesaria, sencillamente es que no me acuerdo.

Ya comenté en otro post (creo recordar de Mayo del año pasado) que me encanta darme largas duchas calientes, casi ardiendo... por lo que sufro cada vez que en casa hay poca agua y tirando a templada... sé que es muy frívolo por mi parte porque hay gente que no llega a esta necesidad básica, pero me considero una afortunada por poder darme este ritual todos los días, incluyendo los dos de rigor en que me lavo el pelo. No hay nada más placentero que una ducha de unos diez minutos en agua calentita, recién despierta y con una línea de baño agradable... a saber, tengo tantas diferentes que cada vez las voy turnando (a pesar de que dos últimas que me compré en The Body Shop me decepcionaron totalmente, sería porque estaban en oferta y me pillaron de malas, eran de melocotón y pomelo rosa, respectivamente) y cada día huelo distinto. Aunque a mí la que más me gusta es la de Hamamélis que digo arriba, ya que como es un olor prácticamente neutro, puedo perfumarme con una de mis infinitas colonias y no dar el cante oliendo cada parte del cuerpo a algo distinto. Me la suelo vaporizar nada más secarme ya que, al estar el cuerpo húmedo, me retiene más el olor. Aunque luego, si salgo de casa, me vuelvo a echar unas gotitas.

Lo dicho, si pudiera, me haría baños, con pompas, largos largos... casi como dice Ana Torroja en "Hawai Bombay"... o sin ir más lejos, como la foto que ilustra este post. Y no soy yo, por cierto. Está sacada de "Internés".